miércoles, 13 de julio de 2016

Cruces de término.

"Y llegó Gutierez Tello, corregidor desta ciudad, y mandó poner cruces en los caminos reales de
Parque del Crucero
 entrada a la misma. Tantas como fuesen necesarias. Y cuatro se colocaron. Una en el camino a Madrid, otra en el de Valladolid, una más en el camino a Sevilla junto a San Servando y una última cerca del puente de San Martín".
                                                                       De las Fábulas Toledanas.

Obviamente las Fábulas Toledanas no existieron. Me he permitido una pequeña licencia para introducir nuestras Postales Toledanas de hoy. Pero la historia y el aludido sí lo son, como vamos a ver.

Al igual que sucedió en muchas ciudades de España, Toledo, vio marcadas sus principales vías de entrada a la ciudad con cruces de término o humilladeros. El término humilladero proviene de la inclinación que los fieles realizaban al pasar por su lado, humillándose ante la cruz, representando pequeños lugares de devoción.

Carretera de Piedrabuena
Juan Gutierrez Tello fue nombrado corregidor de esta ciudad por Felipe II en la década de los setenta del siglo XVI. Entre sus diversas obras destacó, amén de lo indicado, por su defensa a ultranza de la fe católica. Esto lo llevó a arrancar por orden del monarca inscripciones en árabe que se hallaban diseminadas por la ciudad y que supuestamente atentaban contra la verdadera religión. Así mismo puso todo su empeño en dar más empaque a la procesión de Corpus Christi, y a crear obras más mundanas como el Paseo del Miradero y la Alhóndiga.

Durante algunos años mi infancia transcurrió cerca de dos de esas cruces mencionadas al principio. Una, la del antiguo camino real a Madrid, fue en la que más tiempo pasé, pues se encontraba en un parque muy cercano a mi casa y en el que se me iban las horas jugando.
La otra, quedó incorporada al jardín de un colegio construido en los setenta del siglo XX y en el que estudié mis primeros años de EGB. Estaba situado junto a la carretera de Ávila y daba inicio a la avenida de Barber. Hace unos años, cuando se hicieron las obras de la nueva carretera de entrada a la ciudad desapareció, como tantas cosas, misteriosamente. Tan misteriosamente que solo quedan dos de las cuatro cruces.

Publicado el 22/04/2015